***ENTENDIMIENTO. Se espera que los todos los cabalgadores de Silao comprendan la crisis de salud pública que enfrenta el municipio y no vayan a querer salir a echar relajo o hacer jolgorio en los alrededores de la alameda “Miguel Hidalgo”, antigua zona hotelera y símbolo de la bonanza decimonónica de la ciudad. Silao casi roza el millar de casos positivos de coronavirus COVID-19, pero hay algunos por allí que todavía andan pensando en organizar Combate de Flores, a pesar de las restricciones y los protocolos que el Gobierno local ha puesto para disminuir la carga viral o aplanar la curva de contagio.
***SUSPENSIÓN. Ante la grave cantidad de contagios e infecciones, se duda que haya Combate de Flores, una tradición que tal vez alcance los 200 años de edad. Ojalá quienes gustan de cortejar a las damas con flor en mano se abstengan de convocar a las grandes conglomeraciones. Esa “tentadora tentación” de salir a cabalgar representa un gran reto para las autoridades, pues lo de contener a la gente que por pura curiosidad quiera darse una vuelta por la alameda será cosa sumamente difícil, por ser fronteriza entre lo prohibido y lo cuerdo o entre la sanidad y lo enfermo.
***TREJO. El alcalde de Silao, Toño Trejo, tendrá que echarse ese trompo a la uña, evitando que las cosas se desborden el próximo 25 de julio en la calzada Hidalgo sur y las inmediaciones de la alameda. Por si las moscas, tendría que instalarse una especie de retén, porque tal vez no alcance a controlarse el gentío con el simple llamado a quedarse en casa. Veamos qué pasa en Silao el próximo 25 de julio, cuando la ciudad de las limas cumpla 483 años de historia.